Cuando el enemigo quiere tirarte abajo, el lo hace atacando tu identidad. El hizo lo mismo con Jesús y falló ya que Jesús le respondió de vuelta con la Palabra de Dios.
En ese tiempo, el diablo se le acercó y le dijo: “Si eres el Hijo de Dios, …” Mateo 4:3
Después el diablo lo llevó a la santa ciudad, Jerusalén, al punto más alto del templo, y dijo: “Si eres el Hijo de Dios, ¡tírate!” Mateo 4:5-6
El hace lo mismo por nosotros al alimentarnos con mentiras en nuestra mente. “Si Dios te ama, esto no hubiera sucedido,” colocando dudas sobre el amor de Dios. “Tu no vales la pena, eres fea, es por eso que tu esposo salió huyendo,” y así sigue. Muchas veces, no es solo en nuestras cabezas, sino que también escuchamos esas cosas habladas por el enemigo a través de nuestros cónyuges.
¿Cómo respondió Jesús? A través de la Palabra de Dios.
¿Cómo deberíamos nosotros responder? De la misma manera. No a nuestros cónyuges sino al enemigo.
¿Porqué hace esto el enemigo? Si tu crees las mentiras, caminarás en derrota en vez de en victoria. ¿Sabes tú que tú estás en terreno de victoria? Incluso antes de tu poner un pie en el lugar, Dios ya lo ha asignado para ti.
“Te prometo a ti lo mismo que le prometí a Moisés: ‘Dondequiera que pongan los pies los israelitas, estarán pisando la tierra que les he dado.’” Josué 1:3
Desbarata la montaña de mentiras y engaños al usar la Palabra de Dios y las promesas como un arma. Ponte en acuerdo con lo que Dios dice acerca de ti.
“Mis pensamientos no se parecen en nada a sus pensamientos,” dice el Señor, “Y mis caminos están muy por encima de lo que pudieran imaginarse. Pues, así como los cielos están más altos que la tierra, así mis caminos están más altos que sus caminos y mis pensamientos, más altos que sus pensamientos.” Isaías 55:8-9
Tu eres escogido, no olvidado. Tu eres quien Dios dice que eres.
…ustedes son un pueblo elegido. Son sacerdotes del Rey, una nación santa, posesión exclusiva de Dios. Por eso pueden mostrar a otros la bondad de Dios, pues él los ha llamado a salir de la oscuridad y entrar en su luz maravillosa. 1 Pedro 2:9
Dios está todo alrededor tuyo y Su Espíritu está dentro de ti y El ha vencido al enemigo. ¡Tu eres más fuerte que cualquier enemigo!
Así como las montañas rodean a Jerusalén, así rodea el Señor a su pueblo, ahora y siempre. Salmo 125:2
Pero ustedes, mis queridos hijos, pertenecen a Dios. Ya lograron la victoria sobre esas personas, porque el Espíritu que vive en ustedes es más poderoso que el espíritu que vive en el mundo. 1 Juan 4:4
El enemigo es llamado un acusador de los hermanos, pero es un enemigo derrotado – derrotado por la Sangre de Jesús y la Palabra de testimonio.
Luego oí una fuerte voz que resonaba por todo el cielo, “Por fin han llegado la salvación y el poder, el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo. Pues el acusador de nuestros hermanos, el que los acusa delante de nuestro Dios día y noche, ha sido lanzado a la tierra. Ellos lo han vencido por medio de la sangre del Cordero y por el testimonio que dieron. Y no amaron tanto la vida como para tenerle miedo a la muerte.” Apocalipsis 12:10-11
Al enemigo le encanta acusarte al tirarte abajo a través de las palabras de tu cónyuge. Responde con la verdad de Dios.
Por lo tanto, ya no hay condenación para los que pertenecen a Cristo Jesús. Romanos 8:1
¿Quién se atreve a acusarnos a nosotros, a quienes Dios ha elegido para sí? Nadie, porque Dios mismo nos puso en la relación correcta con él. Romanos 8:33
Dios ha prometido cumplir todas Sus promesas para ti. Profetízalas hasta que se cumplan.
“Además, yo estoy contigo y te protegeré dondequiera que vayas. Llegará el día en que te traeré de regreso a esta tierra. No te dejaré hasta que haya terminado de darte todo lo que te he prometido.” Génesis 28:15
¡Si sientes que Dios se está tardando demasiado, aquí hay otra escritura para profetizar ya que El dice que tendremos una victoria rápida!
“Pero reconoce hoy que el Señor tu Dios es el que cruzará delante de ti como un fuego devorador para destruirlos. Él los subyugará para que los conquistes rápidamente y los expulses enseguida, tal como el Señor te prometió.” Deuteronomio 9:3
Así que, fortalécete a ti mismo en el Señor y lucha por tu familia lanzando al intruso con la verdad de la Palabra de Dios. Recuerden que la Palabra de Dios nunca se devuelve vacía.
“¡No le tengan miedo al enemigo! ¡Recuerden al Señor, quien es grande y glorioso, y luchen por sus hermanos, sus hijos, sus hijas, sus esposas y sus casas!” Nehemías 4:14b
“Lo mismo sucede con mi palabra. La envío y siempre produce fruto; logrará todo lo que yo quiero, y prosperará en todos los lugares donde yo la envíe.” Isaías 55:11
Lalitha en los Emiratos Árabes Unidos
Rejoice Marriage Ministries, Inc.
